2 राजा 7
DIJO{H559} entonces Eliseo{H477}: Oid{H8085} palabra{H1697} de Jehová{H3068}: Así{H3541} dijo{H559} Jehová{H3068}: Mañana{H4279} á estas horas{H6256} [valdrá] el seah{H5429} de flor de harina{H5560} un siclo{H8255}, y dos seah{H5429} de cebada{H8184} un siclo{H8255}, á la puerta{H8179} de Samaria{H8111}.
Y un príncipe{H7991} sobre{H5921} cuya mano{H3027} el rey{H4428} se apoyaba{H8172}, respondió{H6030} al varón{H376} de Dios{H430}, y dijo{H559}: Si{H2009} Jehová{H3068} hiciese{H6213} ahora ventanas{H699} en el cielo{H8064}, ¿sería{H1961} esto{H2088}{H1697} así? Y él dijo{H559}: He aquí{H2009} tú lo verás{H7200} con tus ojos{H5869}, mas no{H3808} comerás{H398} de ello{H8033}.
Y había{H1961} cuatro{H702} hombres{H582} leprosos{H6879} á la entrada{H6607} de la puerta{H8179}, los cuales dijeron{H559} el uno{H376} al otro{H7453}: ¿Para qué{H4100} nos{H587} estamos{H3427} aquí{H6311} hasta{H5704} que muramos{H4191}?
Si{H518} tratáremos{H559} de entrar{H935} en la ciudad{H5892}, por el hambre{H7458} que hay en la ciudad{H5892} moriremos{H4191} en ella{H8033}; y si{H518} nos quedamos{H3427} aquí{H6311}, también moriremos{H4191}. Vamos{H3212} pues ahora{H6258}, y pasémonos{H5307} al{H413} ejército{H4264} de los Siros{H758}: si{H518} ellos nos{H587} dieren la vida{H2421}, viviremos{H2421}; y si{H518} nos{H587} dieren la muerte{H4191}, moriremos{H4191}.
Levantáronse{H6965} pues en el principio de la noche{H5399}, para irse{H935} al campo{H4264} de los Siros{H758}; y llegando{H935} á las primeras estancias{H7097} de los Siros{H758}, no{H369} había allí{H8033} hombre.
Porque el Señor{H136} había hecho que en el campo{H4264} de los Siros{H758} se oyese{H8085} estruendo{H6963} de carros, ruido{H6963} de caballos{H5483}, y estrépito{H6963} de grande{H1419} ejército{H2428}; y dijéronse{H559} los unos{H376} á los otros: He aquí{H2009} el rey{H4428} de Israel{H3478} ha pagado{H7936} contra{H5921} nosotros{H587} á los reyes{H4428} de los Hetheos{H2850}, y á los reyes{H4428} de los Egipcios{H4714}, para que vengan{H935} contra{H5921} nosotros{H587}.
Y así se habían levantado{H6965} y huído{H5127} al principio de la noche{H5399}, dejando{H5800} sus tiendas{H168}, sus caballos{H5483}, sus asnos{H2543}, y el campo{H4264} como se estaba; y habían huído{H5127} por [salvar] las vidas{H5315}.
Y como los leprosos{H6879} llegaron{H935} á{H5704} las primeras estancias{H7097}{H4264}, entráronse{H935} en{H413} una{H259} tienda{H168}, y comieron{H398} y bebieron{H8354}, y tomaron{H5375} de allí{H8033} plata{H3701}, y oro{H2091}, y vestidos{H899}, y fueron{H3212}, y escondiéronlo{H2934}: y vueltos{H7725}, entraron{H935} en{H413} otra{H312} tienda{H168}, y de allí{H8033} también tomaron{H5375}, y fueron{H3212}, y escondieron{H2934}.
Y dijéronse{H559} el uno al otro{H376}: No{H3808} hacemos bien{H3651}: hoy es día{H3117} de buena nueva{H1309}, y nosotros{H587} callamos{H2814}: y si esperamos{H2442} hasta{H5704} la luz de la mañana, nos{H587} alcanzará{H4672} la maldad{H5771}. Vamos{H3212} pues ahora{H6258}, entremos{H935}, y demos la nueva{H5046} en casa{H1004} del rey{H4428}.
Y vinieron{H935}, y dieron voces{H7121} á los guardas{H7778} de la puerta de la ciudad{H5892}, y declaráronles{H5046}, diciendo: Nosotros fuimos{H935} al{H413} campo{H4264} de los Siros{H758}, y he aquí{H2009} que no había{H369} allí{H8033} hombre{H120}, ni{H376} voz{H6963} de hombre{H120}, sino caballos atados{H5483}, asnos{H2543} también atados{H631}, y el campo{H4264} como se estaba.
Y los porteros{H7778} dieron voces{H7121}, y declaráronlo{H5046} dentro{H6440}, en el palacio{H1004} del rey{H4428}.
Y levantóse{H6965} el rey{H4428} de noche{H3915}, y dijo{H559} á sus siervos{H5650}: Yo os declararé{H5046} lo que{H834} nos han hecho{H6213} los Siros{H758}. Ellos saben{H3045} que{H3588} tenemos hambre{H7457}, y hanse salido{H3318} de{H4480} las tiendas{H4264} y escondídose en el campo{H7704}, diciendo{H559}: Cuando hubieren salido{H3318} de{H4480} la ciudad{H5892}, los tomaremos{H8610} vivos{H2416}, y entraremos{H935} en{H413} la ciudad{H5892}.
Entonces respondió{H6030} uno{H259} de{H4480} sus siervos{H5650}, y dijo{H559}: Tomen{H3947} ahora{H4994} cinco{H2568} de{H4480} los caballos{H5483} que{H834} han quedado{H7604} en la ciudad, (porque ellos también son como toda{H3605} la multitud{H1995} de Israel{H3478} que{H834} ha quedado{H7604} en ella; también ellos son como toda{H3605} la multitud{H1995} de Israel{H3478} que{H834} ha perecido{H8552};) y enviemos{H7971}, y veamos{H7200} [qué hay].
Tomaron{H3947} pues dos{H8147} caballos{H5483} de un carro{H7393}, y envió{H7971} el rey{H4428} tras el campo{H4264} de los Siros{H758}, diciendo{H559}: Id{H3212}, y ved{H7200}.
Y ellos fueron{H3212}, y siguiéronlos{H310} hasta{H5704} el Jordán{H3383}: y he aquí{H2009}, todo{H3605} el camino{H1870} estaba lleno{H4392} de vestidos{H899} y enseres{H3627} que los Siros{H758} habían arrojado{H7993} con la premura{H2648}. Y volvieron{H7725} los mensajeros{H4397}, é hiciéronlo saber{H5046} al rey{H4428}.
Entonces el pueblo{H5971} salió{H3318}, y saquearon{H962} el campo{H4264} de los Siros{H758}. Y fué{H1961} [vendido] un seah{H5429} de flor de harina{H5560} por un siclo{H8255}, y dos seah{H5429} de cebada{H8184} por un siclo{H8255}, conforme á la palabra{H1697} de Jehová{H3068}.
Y el rey{H4428} puso{H6485} á la puerta{H8179} á aquel príncipe{H7991} sobre{H5921} cuya mano{H3027} él se apoyaba{H8172}: y atropellóle{H7429} el pueblo{H5971} á la entrada{H8179}, y murió{H4191}, conforme á lo que{H834} había dicho{H1696} el varón{H376} de Dios{H430}, lo que{H834} habló cuando el rey{H4428} descendió{H3381} á él.
Aconteció{H1961} pues de la manera que el varón{H376} de Dios{H430} había hablado{H1696} al{H413} rey{H4428}, diciendo{H559}: Dos seah{H5429} de cebada{H8184} por un siclo{H8255}, y el seah{H5429} de flor de harina{H5560} será{H1961} [vendido] por un siclo{H8255} mañana{H4279} á estas horas{H6256}, á la puerta{H8179} de Samaria{H8111}.
A lo cual aquel príncipe{H7991} había respondido{H6030} al varón{H376} de Dios{H430}, diciendo{H559}: Aunque Jehová{H3068} hiciese{H6213} ventanas{H699} en el cielo{H8064}, ¿pudiera ser eso? Y él{H2088} dijo{H559}: He aquí{H2009} tú lo verás{H7200} con tus ojos{H5869}, mas no{H3808} comerás{H398} de ello.
Y vínole{H1961} así{H3651}; porque el pueblo{H5971} le atropelló{H7429} á la entrada{H8179}, y murió{H4191}.